Se sabe, todo el arco cristiano domina el relato sobre la pobreza en la Argentina. El gran estadístico Jorge Casaretto lanzó el irresponsable "40% de pobreza" de la semana pasada, luego lo corrigió a 35%.
Ante tanta furia cuantitativa yo preguntaría el valor de un sólo pobre para su presidida Caritas.
Claudio Lozano, en el extremo izquierdo del arco, le pone ribetes macroeconómicos, imprecisos, a la discución.
La gran empresa de asistencia nacional trata al pobre como "pobre para siempre" sometiéndolo a una institucionalización atroz; todo un dispositivo contado con una sonrisita de incienzo que termina con la transformación del brepo en zombie.
Y nadie dice nada de eso, pero buahhhh...Giordano Bruno también los sufrió, en épocas en las que el diálogo no era tan habitual como ahora.
Pero el motivo del post no es relatar el problemita de Bruno, al calor de su terrible final, tampoco los cauces metodológicos, y peor, conceptuales, de los dispositivos asistenciales eclesiales, sino mostrar que no importa tanto lo que se haga sino cuánto se les pague a los empresarios célibes del asistencialismo nacional:
“Desde el Gobierno de la Ciudad compartimos la visión de la Iglesia sobre la pobreza y la marginalidad, y creemos que tanto el oficialismo como la oposición debemos esmerarnos para elaborar propuestas serias de inclusión si queremos que la Argentina cambie definitivamente esta situación de injusticia social”, señaló Macri, según informó el Gobierno de la Ciudad.Pero las barbaridades que hace el Tilingo en materia de política social, no son denunciadas por Cáritas?!!! 6 a 1, ese drogadicto de Rodriguez Larreta, 6 a 1!
Para no entrar en los datos inflexibles que más lo desfavorecen, diremos que el Gran Lector Dialogador Local cerró (cerró!!!!!!!!!!!!!) el edificio de Desarrollo Social, el conocido averno de Pavón y Entre Ríos.
Allí donde los municipales "de planta" trafican colchones y cocaína, y los pobres en espera miran Crónica TV, para enterarse, in situ, del comienzo de la fase insurreccional, y así tomar el edicicio en el acto.
A Desarrollo Social le corresponden unos $100 millones más de los que hoy dispone ($900 millones).
Fueron escondidos en los tejemanejes del año pasado, que tan habilmente disfrazaron los cambios regresivos.
Dentro de lo que efectivamente se ejecuta en materia presupuestaria, hay un desplazamiento desde los programas que sostuvieron a las organziaciones sociales y territoriales, ampliadas desde el 2001, hacia las organziaciones eclesiales, ampliadas desde el año...1.
En Educación, buehhhhh...mientras el presupuesto general creció un 10%, el de Educación "Pública de Gestión Privada" un 14%: $701 millones.
NUta acá.
Con Bruno también dialogaban; en la foto que engalana el post, el gran Jean María Volonté, en su inmortal interpretación del maestro en artes oscuras de Venecia. Casualmente quemado a instancias de un financista de la Iglesia, que se enojó porque el Monje retirado no le enseñó los secretos de las malas artes.
Simplemente, porque no los conocía.
Le quería enseñar a razonar, pero eso al mercader rico no le importaba.
Y como pensó aquel Papa:
"Si lo mando a quemar me condena la historia, si no lo mando a quemar estos burócratas pederastas me queman a mí...ma sí, préndale fuego!".
Así actúan.
