El Tilingo de Barrio Parque se hace más y más famoso a fuerza de los impresentables sainetes con los que entretetiene a la audiencia nacional.
La difícil situación procesal que lo tiene como protagonista principal no hizo más que agravar los ribetes reaccionarios de su administración: el Cobrador de Impuestos de Barrio Parque, ante cada límite que le plantea la realidad, como quien dice, sale por derecha, en una espiral de dimensiones insospechadas.
Notemos el razonamiento del Garca y su trouppe, en relación con la restricción presupuestaria que supone la ejecución de recursos estatales. En esta oportunidad la derecha se vio en la necesidad de incrementar la masa salarial anual de los empleados públicos en $1100 millones.
El origen del problema se hunde en el falso prespuesto presentado y aprobado a finales de 2009, en el que no se preveían dichos aumentos salariales, presupuesto que contaba, cuenta, con una marcada subestimación de ingresos tributarios.
La realidad del primer trimestre arrojó novedades insoslayables para el Ejecutivo Local. Los ya mencionados aumentos en los sueldos (mayor egreso), se hacen efectivos en un contexto de expectativas económicas aceleradas: pre$tigio$a$ con$ultora$ de análi$i$ económico coinciden en señalar que el crecimiento anual del PBI será del orden de los 6 puntos, y con distintas caracterizaciones sobre el proceso de aumento en los precios también coinciden en observar que el valor de una eventual canasta promedio de consumo se verá incrementado en el orden del 18% al 20%.
Lejos de los 2 puntos y los 6,5 puntos que respectivamente calcularon en las oficinas de gestión derechista.
El hecho es que el ingreso de recursos se aceleró en orden a este contexto económico: las previsiones en materia de recaudación calculadas en la hipótesis más desfavorable, tomando en consideración los comportamientos de los primeros trimestres desde 2005 a la fecha, muestran a las claras que el desfasaje entre la recaudación prevista y la realidad es importante. Y más aún, sospechosamente, tiene como piso $1100 millones y como techo $1200 millones.
Tomamos dos formas de cálculo.
La primera supone mantener la recaudaciones previstas en la Ley para Patentes, ABL y Gravámenes Varios. Por otra parte sostenemos el valor 2009 de los planes de facilidades, sin moratorias rimbombantes: $500 millones.
Luego actualizamos los valores de recaudación de Ingresos Brutos, utilizando las medidas paramétricas del peso del primer trimestre en el período 2005 - 2009: los mayores ingresos por este impuesto serían del orden de los $430 millones. No contemplamos ajustes proyectados por el empinamiento inflacionario, ni por perspectivas de mayores movimientos de cantidades de bienes y servicios comercializados.
Finalmente, el cambio de normativa en el Impuesto a los Sellos, no sujeto a interpretaciones optimistas, con la aplicación del genial Valor Inmobiliario de Referencia, que sube el monto base de las transacciones de inmuebles del 45% declarado al 65% declarado, en promedio, debe permitir recaudar $370 millones más.
Total: $1200 millones.
Segunda forma de cálculo: tomamos la recaudación global del primer trimestre y le aplicamos los mismos valores paramétricos para proyectar su anualización - los verificados en el período 2005 - 2009: el mayor monto sería por $730 millones. A ello hay que sumarle la ampliación de Sellos (rige desde el 1º de Marzo).
Total: $1100 millones.
En ambos escenarios, que no contemplan ajustes por inflación y mayor crecimiento económico, estaría cubierto el mentado desafasaje producido por los aumentos salariales.
El Garca Barrioparquense, asumiendo que los costos de dichos aumentos deben ser pagados por la generalidad de los contribuyentes, propone subir medio punto porcentual la alícuota de Ingresos Brutos. Un impuestazo, digamos.
Qué consecuencias económicas y sociales tiene este, eventual, aumento de alícuotas? Será materia de otro post.
Qué justificación tiene? Ninguna.
Pero así gobierna la derecha, Señoras y Señores!
-Cuánto salen estos aumentos, Néstor?
-Cuáles, los de los intereses de los bonos o los de los precios de los contratistas?
-Nó, los salariales!
-...yyyy...1100 palos.
-Bueno, que cada habitante de la Ciudad ponga $300 más por año, yo los voy a curar!
Fácil, para el Garca, cagar gente es fácil.
