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Mientras escuchamos al gran estadista paseandero Ricardo Alfonsín (hijo, obviamente) explicar los límites de las políticas keynesianas para resolver los problemas del mundo (?), en el programa partidario de Joaquín Morales Solá, observamos una noticia desapercibida para los grandes medios.
El Tilingo de Barrio Parque logró que la justicia obligue al Gobierno Nacional a expedirse sobre el pedido de autorización que oportunamente le remitiera la Ciudad para endeudar al Estado Local con el Resto del Mundo, y así poder realizar todas aquellas obras que la crisis económica obstaculiza.
Notita haciendo click aquí.
En tren de evaluar la pertinencia del mencionado endeudamiento es necesario remarcar la oscuridad de las cuentas del Garca, que tiene un agujero de casi $2.000 millones, si tomamos en consideración que guarda en la covacha $820 millones para retiro voluntario de trabajadores, en año de crisis, y los harto consignados por TCM casi $1000 millones de obras a las que le aplicó el tijeretazo.
En realidad poco sabemos de la evolución de la recaudación de la Ciudad, pero vemos que la recaudación nacional creció un 23% en marzo con respecto al mismo mes del 2008. Esto nos hace pensar que la reca de Ingresos Brutos de la Ciudad (80% del total de impuestos) no puede haber caído dramáticamente. Click acá.
Bajo este manto de confusión sobre los datos fehacientes del estado de las cuentas públicas locales, y habiendo pagado tasas de regalo (para los prestamistas) por fondos frescos a 45 días (casi 17%), el Tilingo Barrioparquense endeudador se lanzaría a la caza de U$S 400 millones si el Gobierno Nacional se lo permitiera, o se seguirá victimizando en público, si se lo prohibiera.
Arriesgamos, que de conseguir el permiso por parte del malvado matrimonio, sale corriendo a pedirle crédito, y comisiones, al Cavalieri Berlusca di Milano.