"Pero más abominable aún que los imperialistas son los hombres de las oligarquías nacionales que se entregan vendiendo y a veces regalando por monedas o por sonrisas la felicidad de sus pueblos". Eva Perón
jueves, 12 de marzo de 2009
Los primos de Bartolo
Se presentó hoy "El aporte del campo a la política" un berretísimo documento, que chorrea la confusión y el cinismo de la dirigencia patronal agropecuaria, plantada como acreedora de toda la sociedad por su "talento" en el uso productivo de la tierra y por su capacidad generadora de divisas.
Si bien no se soportó la totalidad de los discursos, el pensamiento económico que trasluce de los mismos, y del texto en cuestión, sintetiza los rudimentos necesarios para condenar la reproducción de la matriz productiva más o menos diversificada kirchnerista, que contempla al menos 3 millones de puestos de trabajo, que en el modelo expuesto por Amigazo y Amiguitos no serían factibles ni a placé.
La oligarquía rancia y sus nuevos aliados arrendatarios de 1000 Ha. proponen sin más:
"-Contribuir al establecimiento de un sistema tributario más justo que posibilite una distribución equitativa de la carga fiscal, estimulando el crecimiento de la producción y la creación de la riqueza.
-Establecer una misma política cambiaria para todas las actividades. Es imprescindible para ello eliminar los derechos de exportación y mientras esto se logre, segmentarlas.
-Jerarquizar el Impuesto a las Ganancias, generalizándolo a todas las actividades lucrativas, como eje de la recaudación fiscal coparticipable.
-Diseñar una política de incentivos para los productores de ganadería, de lechería, de granos y de economías regionales, basada en beneficios impositivos y en líneas de crédito que contemplen la naturaleza de la actividad y de los ciclos productivos, teniendo como prioridad a las PYMES agropecuarias."
Texto completo acá.
Las consecuencias de este rudimentario plan sojero son inevitablemente la dilución de la autoridad central en lo político, el retorno de la espiral déficit fiscal/endeudamiento, y la descompensación definitiva de la estructura productiva, en detrimento de la industria, vía transferencia neta de riqueza en retribución rentista a los dueños de la tierra, los puertos y la tecnología de siembra.
El Amigazo del 1800, la completó reflexionando sobre los innecesarios rescates a la industria automotriz, evitables si a ellos los dejaran comprar más y más de las mentadas 4x4, para surcar los desechos caminos del "interior profundo", de Armstrong y Las Varillas.
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