Dos subestimaciones

Mientras él mismo anuncia terribles temporales para la tarde, vemos que en su columna patronal del matutino, Marcelo Bonelli supone que los empresarios resignarán la rentabilidad de eventuales inversiones al sentirse agobiados por el escaso "clima de negocios" que genera la Presidenta.
También los hombres de negocios reconocen que la recesión está quedando atrás y que la economía puede crecer un 4% el año próximo.
Pero los industriales advierten un problema: que esa recuperación no mejorará la situación social, que se verá afectada por una mayor inflación que el INDEC ya no puede ocultar.
Ayer los hombres de negocios avalaron la exposición de Eduardo Duhalde. Conocieron el detalle y apoyan una gestión secreta del ex presidente para pactar políticas de Estado con Julio Cobos, Carlos Reutemann y Mauricio Macri. Los cuatro tuvieron un diálogo reservado para enfrentar con políticas concretas a Néstor Kirchner.
En esa línea de "consensos" también se van a manifestar hoy en forma conjunta Héctor Méndez, Jorge Brito y Hugo Biolcatti. Hay expectativa porque los tres hablarán en Mar del Plata. Los empresarios advierten que el enrarecimiento político puede sacarle fuerza a la actual reanimación productiva. Alberto Schuster -titular del Coloquio de IDEA- denuncia que cayó la inversión. En privado, Gustavo Ripoll -titular de IDEA- sostiene que el actual deterioro de la confianza y el clima adverso a los negocios frena decisiones de crecimiento. Afirman lo que sostiene el establishment: el creciente malestar por las regulaciones contra los empresarios.
Importantísimas propuestas técnicas de Plástico Héctor Méndez en el Coloquio de IDEA (?).
Otro dato importante de la nota es que ni los pesimistas, como Bonelli, ubican el crecimiento esperado del PBI en 2010 por debajo de los 4 puntos, el doble de la previsión del Tilingo de Barrio Parque en su Proyecto de Ley de Presupuesto.
El valor del crecimiento esperado es central para calcular la recaudación, y semejante subestimación, como ya dijimos, puede repetir la situación de 2008, con un adicional, por sobre lo previsto, en torno a los $2000 millones.
El eventual ingreso de estos fondos reacomodaría la ecuación presupuestaria de la Ciudad, hoy ceñida en la letra de la Ley a, por ejemplo, no otorgar nuevos aumentos salariales o abandonar obras de Subtes e infraestructura social.
Y como dice Bonelli, a pesar de este calor agobiante, seguiremos informando, aquí, en...TCM.