El Ultimo, el Gran Organizador de Juego del Fútbol Mundial, se sabe, fue desplazado del conjunto nacional, luego que los "Rapiditos del 10" se prendieran en un imposible bombeo contra Alfio Basile y cantaran una serie de boludeces en el micro que los trasladaba.
Ante semejantes faltas de lealtad, propiciadas o apañadas por "El 10", el Triste decidió dar un paso al costado, pero nunca criticó al equipo nacional, sino por el contrario, aún estando conformado por una bandurria de alcahuetes, sigue alentando y sacando presión, como cuando la pide, sin cesar, en los momentos álgidos de una final.
En esta oportunidad El Mensaje de Román se refiere a la capacidad de los defensores argentinos, con el ejemplo de su amigo Samuel, y a la presión adicional que hay sobre el astro del Barcelona.
Al parecer de Riquelme, los defensores en Europa "son más inocentes" que los de esta parte del mundo y eso genera las diferencias en el juego de Lío. "A Lionel acá lo agarran, lo chocan, lo pelean. Si el defensor argentino que va a Europa no vuelve más", opinó en declaraciones a Radio Del Plata, y puso como ejemplo el de Walter Samuel.
Nota.
En cuanto a la necesidad del Triste en el equipo, bueno, ya es discución agotada, ya quedó en el olvido el obvio comentario "hace más lento el equipo, lateraliza...".
Juega.
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