Obras de Ingeniería, obras que se financian con los Fondos expropiados a los Jubilados y con los granos expropiados al pobre Mario Llambías.
Pero son obras bajo Tierra, nadie se dió cuenta aún de su factura.
Los problemas de comunicación que tiene el Gobierno Nacional...
El 2 de mayo de 2006, el entonces presidente Néstor Kirchner abrió el sobre con la oferta más económica para ampliar la línea E de Bolívar a Retiro. El llamado para la precalificación de oferentes se había hecho en 1999, las ofertas se presentaron en mayo de 2001, y finalmente cinco años más tarde se anunció cuál sería la empresa que emprendería las obras. Benito Roggio e Hijos, ganó la licitación superando las propuestas de Techint, la Unión Transitoria de Empresas conformada por SADE y la cuestionada Skanska, Gualtieri, Cartellone Construcciones, DYCASA y Dragados Construcción P.O.S.A, sellando un contrato por 346.712.643 pesos. El Gobierno Nacional proyectaba una inversión menor a ese monto, 210 millones de pesos.
Diez años después del inicio del proceso, finalmente la construcción del nuevo tendido subterráneo comenzó. Un túnel de 2.300 metros unirá Plaza de Mayo con la terminal de Retiro y tiene un plazo de ejecución total de 36 meses.
La prolongación de la Línea E bajo la avenida Leandro N. Alem contendrá tres nuevas estaciones: Correo Central, Catalinas y Retiro.
Sobre los 150.000 kilómetros de Subtes nuevos, que en su momento prometió el Firmador Irresponsable de Barrio Parque, nada se sabe aún.
La única ampliación de líneas que se prevé y está en marcha es la de la línea E, desde la estación Bolívar hasta Retiro, con tres estaciones en el medio, y gran utilidad para descargar la C, en la que hay horarios que no se puede viajar, ni siquiera a la japonesa.
La obra la paga el Estado Nacional, en responsabilidad de la Maltratadora Mayor de los Porteños Libres, la Presidenta Cristina Fernández.
Escasísima difusión del anuncio.
NUta.
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